Fueron catorce de 16 candidatos a la Presidencia de la República los que se dieron cita el último fin de semana en el Teatro de la Casa de la Cultura para exponer sus propuestas de gobierno, en un denominado Debate presidencial que organizó el holding de medios del Grupo El Comercio, a 27 días de que los ecuatorianos acudan a las urnas, el próximo 7 de febrero.

Este evento se dividió en dos jornadas debido al número de candidatos participantes por los diferentes movimientos y partidos políticos.

El sábado 9 de enero se presentaron siete postulantes y el domingo otros siete, quienes tuvieron en total 2 minutos y medio para detallar sus propuestas sobre cuatro ejes temáticos que fueron planteados por los organizadores: salud y pandemia; economía, producción y empleo; seguridad ciudadana y lucha contra la corrupción.

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Los únicos que declinaron de participar fueron Andrés Arauz, postulado por la alianza Unión por la Esperanza; y Yaku Pérez, cobijado por el movimiento Pachakutik (PK).

Gonzalo Ruiz, subdirector del diario El Comercio, cree que fue "penoso" que Arauz y Pérez no hayan "aceptado el reto", pero resaltó que "fue un esfuerzo" de este medio de comunicación este encuentro político, que permitirá a la ciudadanía decidir a quién elegirá en las urnas.

El formato era un debate, aunque los candidatos se limitaron a exhibir sus propuestas de campaña.

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Ruiz explicó que se informó a los candidatos que este era un debate, pero ellos decidieron no debatir.

"Fue una exposición libre de las propuestas. Cada candidato, si hubiese querido debatir, o contraponer, replicar algo de lo que dijo alguno de sus compañeros del panel tuvo el tiempo para eso. Y lo advertimos, pero no lo hicieron", señaló.

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Entre los candidatos hubo ciertas coincidencias en sus ofrecimientos, pese a que no se explicaba cómo las harían.

Se habló de promover la generación de empleo. Guillermo Lasso (PSC-CREO) ofreció crear dos millones de empleos; y Ximena Peña (AP) dar un ingreso "excepcional" a aquellos que perdieron su empleo; mientras que Paúl Carrasco (Podemos) habló de 700.000 empleos en una reactivación económica.

Isidro Romero (Avanza) y Gustavo Larrea (Democracia Sí) hablaron de potenciar la agricultura.

Giovanny Andrade (Unión Ecuatoriana) comprometió bajar los impuestos, entre ellos la reducción del 2% del IVA. Lucio Gutiérrez (PSP) también ofreció reducir el IVA del 12% al 10%.

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En salud, los candidatos mencionaron la urgencia de adquirir vacunas para prevenir el COVID-19.

Juan Fernando Velasco (Construye) dijo que buscará que se vacune al 75% de la población; Pedro Freile (Amigo) ofreció traer al país a las farmacéuticas para que produzcan las vacunas y extiendan su venta en la Cuenca del Pacífico.

César Montúfar, el candidato de la alianza electoral Honestidad, dijo que buscará generar una política de vacunación transparente con vigilancia de la sociedad civil, que garantice la inmunización de al menos el 70% de la población ecuatoriana.

En seguridad ciudadana, Carlos Sagnay (Fuerza Ecuador) dijo que endurecerá las penas en contra de los delincuentes; Gerson Almeida (Ecuatoriano Unido) dijo que combatirá la delincuencia "empoderando" a las familias.

Xavier Hervas (ID) cree que debe reactivarse la economía para "devolver el trabajo" a aquellos que lo perdieron, combatir el microtráfico y la violencia de género.

Guillermo Celi (SUMA) ofreció desarticular y desarmar a los delincuentes y crear más escuelas de capacitación y formación para la Policía.

En los dos días de debate, que sumaron 240 minutos de transmisión en vivo, fueron pocos los roces que se observaron entre los presidenciables.

El sábado, Romero fue el primero en intervenir y en explicar por qué quería ser presidente.

Pero decidió desafiar a Lasso llamándolo "muchachito malcriado" porque no lo saludó. Lasso no le respondió y Romero apenas pudo explicar por qué quería ser mandatario.

El domingo, Montúfar emplazó a Lasso a presentar información respecto de una presunta triangulación de dinero a través de un banco privado de la que él fue directivo, en el denominado caso del Instituto de Seguridad Social de la Policía Nacional (Isspol). Afirmó que presentaría la denuncia en la Fiscalía General.

Montúfar también generó tensión entre los aspirantes presidenciales al criticarlos porque no renunciaron a ocupar el Fondo de Promoción Electoral (FPE) que proviene de fondos estatales, para promocionarse en medios de comunicación.

Almeida respondió -sin mencionarlo- que hay candidatos que deberían renunciar a visibilizarse en los procesos electorales aquellos que ya han participado y dar oportunidad a nuevos rostros.

En todo caso, para Ruiz se logró que este sea un "debate serio"; y si las propuestas "fueron serias o no" ello lo decidirán los ciudadanos. "La ciudadanía tiene en sus manos la capacidad de análisis y tendrá en sus manos algo que es sagrado como es su voto", indicó.

Este sábado 16 y domingo 17 de enero, se llevará a cabo el debate presidencial oficial y obligatorio, que lo realizará el Consejo Nacional Electoral (CNE). Y el aspirante a Carondelet que no asista será sancionado con la pérdida de su candidatura y podría perder sus derechos políticos.

Para jueves y viernes está previsto el debate de la Cámara de Comercio de Guayaquil. (I)