Autoridades investigan la muerte de un menor de 10 meses que se reportó en Bahía de Caráquez el pasado 11 de enero. El infante fue llevado sin signos vitales por sus padres aproximadamente a las 10:00 hasta el hospital Miguel Hilario Alcívar.

De acuerdo al reporte policial, los padres habían indicado que la noche del domingo el menor presentaba gripe, tos y anemia moderada y que al despertar al día siguiente estaba helado.

La mujer, habría llamado al ECU 911 y personal a cargo trasladó al bebé desde su vivienda ubicada en la ciudadela Bellavista al hospital antes mencionado por tener saturación baja. A esta casa de salud llegó sin signos vitales.

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Agentes policiales fueron hasta el hospital donde se entrevistaron con los médicos y con la mamá del menor y obtuvieron dos versiones distintas. En el parte policial se indicó que personal médico, determinó que el bebé presentaba huellas y laceraciones en su cuerpo. El examen físico firmado, detallaba laceraciones y hematomas.

Luis Castillo Giler, fiscal de Bahía de Caráquez, que sigue el caso, manifestó que tras el levantamiento del cadáver del infante con la Dirección de Delitos contra la Vida, Desapariciones, Secuestro y Extorsión (Dinased) y Criminalística se dispuso la retención de sus padres, ya que en el cuerpo del menor se evidenciaba hematomas en la cara como en el cuerpo del pequeño, así como laceraciones en la parte del cuello.

Eso hace presumir que el menor no murió de forma natural. La noche del lunes el informe de los peritos señalan que murió de muerte violenta ya que el cuerpo presentaba infiltraciones en el cuello y en su cabeza, daños en el hígado y pulmón, así como hematomas en el tórax, rastros que no se reflejan en una muerte natural, indicó el fiscal.

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Inmediatamente, se ordenó la aprehensión de los padres.

Se esperan aún los resultados de los exámenes toxicológicos que den más indicios de la muerte del infante. (I)