“¡Lo logramos! El CNE no pudo eliminar el binomio de la esperanza. La situación del país es tan precaria que debemos estar contentos”, su expresión, de plácemes; y puede eternizar su vida en Bélgica, disfrutar los millones de la década despilfarrada, ¡pero ser persona real justifica no retornar a lidiar con el desastre de un país que no resiste más fascismo populista!
Inscribir sus candidatos con errores intencionados para forjar su descalificación; una tentativa para evadir el trajín de campaña y su entierro político, ya que sabe que no llegó al 14% en los últimos comicios. La papeleta evidencia amplia posibilidad para escoger responsablemente. Es aconsejable no desperdiciar el voto por quien no tiene certidumbre de segunda vuelta. Mediante una legislación racional lo justo sería que entre los candidatos postulados por partidos y movimientos, en primarias se elija al representante de cada tendencia, no a predestinados del bipartidismo. Una reflexión si me permiten, por cuál tendencia votar, es decisión personal. (0)
Jorge Benigno Falcones Alcívar, doctor en Medicina, Guayaquil